La carrera fiscal es, junto con la judicial, una de las oposiciones más exigentes y prestigiosas de España. Requiere años de estudio, un temario muy amplio y gran capacidad de resistencia. A cambio, quienes superan estas oposiciones acceden a un puesto con estabilidad, proyección y una de las mejores retribuciones de la función pública.
En este artículo analizamos cuánto cobra un fiscal en 2026, detallando el salario base, los complementos, las diferencias según el escalafón y la evolución con la experiencia.
Salario base en 2026
Los fiscales pertenecen al grupo A1, al igual que los jueces.
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Salario base bruto mensual: en torno a 1.300 euros.
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Pagas extraordinarias: dos al año (junio y diciembre).
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Trienios: cada tres años suman alrededor de 50-60 euros brutos mensuales.
El verdadero atractivo salarial está en los complementos.
Complementos principales
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Complemento de destino
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Depende del nivel del puesto ocupado.
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Puede rondar entre 1.000 y 1.400 euros brutos mensuales.
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Complemento específico
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Compensa la dificultad, la carga de trabajo y la responsabilidad del cargo.
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En 2026 se sitúa en torno a 1.000-1.600 euros brutos mensuales, según el destino.
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Otros pluses
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Indemnización por residencia en Canarias, Ceuta o Melilla.
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Pluses por guardias en determinados destinos.
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Sueldo neto aproximado en 2026
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Fiscal en prácticas (primer destino): alrededor de 2.400-2.600 euros netos mensuales.
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Fiscal de carrera con destino en una fiscalía provincial: entre 2.800 y 3.200 euros netos.
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Fiscal con años de experiencia (audiencias provinciales o tribunales superiores): 3.500-4.000 euros netos.
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Fiscal de sala del Tribunal Supremo: más de 5.000 euros netos mensuales.
Evolución salarial con la carrera fiscal
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Inicio (0-5 años): fiscal en prácticas y primer destino, 2.400-2.600 € netos.
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Carrera media (10-15 años): fiscales en audiencias provinciales, 3.200-3.500 € netos.
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Etapa avanzada (20+ años): fiscales de sala o en el Tribunal Supremo, 5.000 € netos o más.
Comparativa con jueces
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Sueldo inicial: muy similar (en torno a 2.400-2.600 € netos).
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Evolución: tanto jueces como fiscales pueden superar los 5.000 € netos en la cúspide de su carrera.
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Diferencias: dependen más del destino concreto que de la carrera elegida, ya que las escalas retributivas son bastante paralelas.
Perspectivas de subida en 2026
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Subida ligada al IPC: entre un 1 y un 3 % sobre las retribuciones actuales.
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Reivindicaciones asociativas: las asociaciones de fiscales reclaman mejoras salariales para reducir la sobrecarga de trabajo y equipararse a jueces en todos los niveles.
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Posible revisión de complementos: se estudia actualizar los complementos específicos en destinos con mayor carga de procedimientos.
Ventajas y retos de la oposición
Ventajas
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Sueldo alto desde el primer destino.
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Estabilidad laboral y prestigio profesional.
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Evolución salarial muy favorable con la antigüedad.
Retos
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Oposición muy dura y larga (4-5 años de preparación).
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Gran exigencia en el día a día, con elevada carga de trabajo.
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Responsabilidad directa en la persecución de delitos y en la defensa del interés público.
Conclusión
En 2026, un fiscal en España cobra entre 2.400 y más de 5.000 euros netos mensuales, dependiendo del escalafón y la antigüedad. Se trata de una de las oposiciones más duras y prestigiosas, pero también de las que ofrecen una retribución más elevada y estable dentro de la Administración de Justicia.
